Omar Villamizar Ariza.
Hoy amanecimos con un nuevo "escándalo" promovido por los medios de comunicación quienes vienen armando una tormenta en un vaso de agua en todas las actuaciones del alcalde de Bogotá Gustavo Petro a quien en ningún momento le achacan (por que no pueden) ningún acto de corrupción, por la adquisición de unos equipos para tapar huecos en las vías.
Mientras "Los cositeros" se enfrascan en trivialidades, en el resto del país los negociados y los niveles de corrupción han llegan hasta el punto de no ejecutarse las obras de los contratos porque el ad judicante pide el 50% de comisión, menos el 20% de impuestos, menos el 30% del contratista. esta práctica es ampliamente conocida en la costa norte colombiana pero se generaliza paulatinamente en todo el país.
Los niveles de persecución contra el gobierno de Bogotá ha llegado a tal punto, que el ejecutivo ha determinado limitar al máximo la contratación estatal con el fin de no verse envuelto en investigaciones por parte de los organismos de control que ven a Bogotá como el único ente gubernativo que realiza contratación. Así las cosas al finalizar este gobierno habrá mucho dinero en las arcas de un gobierno justo.
No pasarán 2 o 3 días cuando, para variar, los medios nacionales se enfrasquen en otra nimiedad, que busca entorpecer la labor del gobernante con la complacencia de un puñado de"periodistas prepagos" que están dispuestos a decir estupideces con tal de congraciarse con sus jefes laborales que pertenecen a las cadenas productivas del país.
Gracias por compartir este artículo.
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