La traición, la mentira y el cinismo son de los defectos que los piedecuestanos cobran sin contemplación, por lo menos así quedó demostrado en la pasada campaña política, en donde el también ex alcalde Raúl Cardozo quiso reconquistar a los ciudadanos de este municipio a punta de dádivas pero primó en el imaginario popular el trato despectivo que como mandatario éste dio a sus conciudadanos y fue así como el dirigente conservador sintió en carne propia los rigores del desprecio popular, al recibir solo cuatro mil votos de 20 mil esperados para al Senado de la República.
Dicen que la historia se repite, y en la actualidad el mandatario local de los piedecuestanos se ufana manifestando a los más cercanos, que él ya está por encima del bien y del mal, que ya logra su pensión y que afortunadamente ya no necesita más de la gente, palabras casi que calcadas de su copartidario Cardozo, quien igualmente así se expresaba como mandatario hace 8 años y seguramente así lo sentía, pero la vida, pasa cuenta de cobro y que mejor que nutriendo su egocentrismo y añoranzas de poder que los empuja cual bestias desbocadas a la arena política en donde luego de la contienda yacen abatidos no solo por los escasos votos sino por los abultados desplantes y palabras de desprecio que cala hasta el tuétano del mas desentendido o estoico personaje...
En ese trasegar, mandatarios como el actual ha querido comercializar todo lo que a su paso encuentra, nunca antes ciudadano alguno había contemplado la posibilidad de alquilar mucho menos vender un parque, ese "privilegio" le ha tocado al mandatario actual, y no contento con ello, y motivado probablemente por intereses personales promueve la instalación de un basurero en el sector de mayor
proyección urbana del departamento de Santander, la vereda de Monterredondo situada en el valle de Guatiguará. en donde existe nacimientos hidrográficos, zona industrial y proyección habitacional del departamento y la nación de más de 20 mil viviendas subsidiadas en los próximos 10 años y otras tantas del sector privado.
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