150 empleados de la única empresa "nativa" de Piedecuesta que contrata personal de este lugar llamada FORMADCOL, que presta los servicios de alquiler y venta de andamios y formaletas para la construcción; está a punto de ser cerrada por el gobierno de la ética del curiteño Ángel de Jesús Becerra Ayala, quien tomó la decisión debido a que ésta funciona en el casco urbano y es obligada a funcionar en la zona Industrial vereda Guatiguará. Sin embargo, allí tampoco le permiten el funcionamiento por que las áreas de la empresa adquiridas, figuran como zona industrial y agrícola y para estos menesteres necesita ser industrial. Según conocimos.
Por cositas así de insignificantes, en donde la solución es reunirse en el Concejo Municipal y cambiar el uso del suelo, es que este grupo de trabajadores con pitos y cornetas se pararon 8 horas frente a la alcaldía para reclamarle al mandatario diligencia y administración ya que ni los deja trabajar en el casco urbano, ni les concede LICENCIA para la zona industrial, en donde cada cambio que realiza el gobierno en el uso del suelo, está motivado por intereses económicos de índole personal como lo dijera a este medio un propietario de la región a quien le solicitaban doscientos millones de pesos (por debajo de la mesa) para cambiarle el uso del suelo de su predio que solo mide 2.000 M2.
La corrupción generada en estas decisiones, es lo que mueve sin lugar a dudas a gente adinerada a hacerse elegir, para legalizar sus negocios particulares o "convenir" con los propietarios, y lo peor de esta situación, es que los afectados, son extorsionados, pero no se atreven a denunciarlos para evitar problemas, y lo que consiguen es consentir el ilícito a través del tiempo que irán a afectar negativamente a sus condescendientes.
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